Un total de 239 centros educativos públicos desarrollan los proyectos ‘Creciendo en Salud’ para Primaria y ‘Forma Joven’ para Secundaria.
Un total de 78.105 alumnos y alumnas de 239 centros educativos públicos de la provincia de Almería participan este curso en los programas de promoción de hábitos de vida saludable que impulsan las consejerías de Educación, de Igualdad, Salud y Políticas Sociales y de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural. La iniciativa ‘Creciendo en Salud’, destinada a escolares de Infantil, Primaria y Educación Especial, se desarrolla en 167 colegios y la modalidad ‘Forma Joven’, dirigida a ESO y Bachillerato, lo hace en 72 institutos.
La delegada de Educación, Francisca Fernández, ha asistido a una jornada de coordinación a la que han asistido los 46 docentes que se incorporan en esta edición al programa ‘Forma Joven’. Su objetivo, ha señalado Fernández, “es capacitar a chicos y chicas para que elijan las opciones más saludables en torno a la alimentación, la actividad física, la afectividad y la sexualidad, con la finalidad de fomentar su bienestar psicológico, físico y social”.
“La Junta ha realizado un gran esfuerzo en actualizar y renovar estos programas de hábitos de vida saludable en los que los centros educativos son protagonistas pero buscando la implicación de otras instituciones y agentes sociales como ayuntamientos y asociaciones de madres y padres”, ha destacado la delegada de Educación.
Un total de 24.645 estudiantes de ESO y Bachillerato participan este curso en las distintas iniciativa adheridas al programa ‘Forma Joven’, una estrategia de salud dirigida a promover entornos y conductas saludables entre la juventud.
Las líneas de intervención que llevan a cabo en este programa en los centros educativos son las de Educación Emocional, Estilos de Vida Saludable, Sexualidad y Relaciones Igualitarias, Uso positivo de las TIC y Prevención del Consumo de Alcohol, Tabaco, Cannabis y otras drogas. La línea prioritaria y obligatoria es la educación emocional a la que cada centro suma otras elegidas entre diferentes posibilidades que se ofertan.
La estrategia consiste en acercar las actividades de promoción de la salud y de prevención de los riesgos asociados a la salud, a los entornos donde conviven jóvenes y adolescentes y otorgarles, además, un papel activo y central en dichas actividades.
Se desarrolla en los diversos espacios frecuentados por la población adolescente y juvenil como son institutos de enseñanza secundaria, escuelas taller, universidades, espacios de ocio, comunitarios, etc.